Torni Segarra

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2057. Todo está unido. De manera que si tú eres un beato católico, o monárquico, y consigues ser alcalde, tarde o pronto eso que eres, eso que tienes en tu interior va a salir a fuera en cada cosa que hacemos. Así que si soy monárquico, un devoto católico, voy a defender todo eso.
No se puede ir contra lo que somos internamente, pues lo interno es más poderoso que lo externo y se va a imponer.
Todas las dictaduras, como van contra la sagrada libertad, independencia, son perdedoras, están acabadas. Los dictadores son feos, perros rabiosos, corruptos e inmorales, capaces de hacer lo que sea necesario para perpetuarse en el poder, sea el que sea.
 
2058. Acuérdate que de momento no se ve en el horizonte a dictadores como Franco, personajes como Hitler, Mussolini, etc., que esos eran capaces de romperlo todo. ¿Está el mundo ahora preparado para generar unos personajes tan crueles, violentos, sádicos guerreros?
Te lo digo porque da la impresión como si los tuvierais ahí preparados para hacer de las suyas. Y esa ilusión te envalentona, pero no tienes tierra donde pisar.
 
2059.La ley se cumple si es que se puede cumplir. La obediencia debida está contemplada para la policía y el ejército. También están los que no la cumplen por un problema de conciencia -los médicos que no quieren participar en un aborto; los que no quieren participar en actos violentos, guerras, etc.; los que no quieren impartir ciertas materias en los institutos de enseñanza-,
Por lo que la mejor ley es la que no existe. Pues si existe una, por racional y adecuada que la veamos, siempre habrá otros que la rechazan por inadecuada, cruel y violenta.
La pregunta es: ¿Si algo es verdaderamente justo, igualitario, vivifica y potencia la libertad, el orden, qué necesidad habrá el tener que usar la fuerza, para que la ley haya de llegar con fórceps, con sanciones, amenazas, con crueldad y violencia? Pues el fin siempre es que no haya violencia, desorden, confusión, indolencia e indiferencia ante la realidad de los hechos, los retos, que van a generan un bucle que da más violencia.
 
2060. Los que se erigen como un nuevo paradigma de honestidad, de ausencia de corrupción, lo tienen muy difícil. Pues son ellos en primera persona los que tienen de hacer de jueces de ellos mismos. Y ahí sabrán qué es eso de juzgar, o no juzgar, ser parte o no, ser imparcial y extremadamente justo.
 
2061. ¿Cómo se mide el sentir mayoritario? Si se puede decir que uno quiero algo y al instante siguiente ya quiere otra cosa, lo contrario. Además toda encuesta, opinión, teoría, etc., está mediatizada, condicionada por la persona que la elabora.
Por lo que todo es tan infantil, superficial, vulgar, como corresponde a los que viven en la ilusión del dogma y el fanatismo.
 
2062. Eso es mucho decir, Antonio. Es como si uno tiene un hijo de 18 años y dicen que todo lo que hace mal la culpa la tiene su padre. ¿Puede ser eso verdad, toda la verdad? Toda la verdad seguro que no. Porque la única verdad irrefutable es que moriremos. En todo lo demás es soberbia, vanidad, ignorancia, fanatismo, que nos hace actuar como dogmáticos creyentes en una sola cosa, una sola idea, un solo dios y su religión, una sola teoría política que creemos, claro, que es la mejor en contraposición de otra que decimos que es la peor, la única culpable de todos nuestros males.
Esto sólo quiere decir que mentalmente estamos subdesarrollados.
 
2063. Dices muchas cosas, Alberto, que suenan escandalosas, pero no tienen ningún valor si tú no las vives en primera persona para saber eso qué es.
Cuando alguien tropieza contigo y te pisa un pie, ¿la reacción no está más allá de toda norma, de toda ley? Porque esa respuesta al reto del tropezón es instantánea de manera que el pensamiento no puede operar. Es decir, según el reto así va a ser la respuesta.
Ahora vienes tú y empiezas a decir que la ley, las normas, los preceptos, se tienen que cumplir. Y en eso estamos de acuerdo. Pero hemos de ver que las leyes sean justas, no tiránicas, no corruptas, hechas sólo para unos cuantos privilegiados. Porque puede suceder que, si las leyes no son adecuadas, igualitarias, vivificando la libertad, llegue la respuesta instantánea, donde no puede haber control en absoluto. Ya que el pensamiento a la velocidad que funciona la realidad no la puede seguir, controlar.
Por eso la ley, si no es justa, igualitaria, abierta y promoviendo la libertad total, hace todo lo contrario que lo que debería ser: el imperio del orden, de la armonía, de ausencia de brutalidad, de crueldad, de violencia, de las matanzas en masa de la guerra. Si no es así, la ley no sirve para nada, solamente para los que la han inventado para proseguir sacando beneficios, poder, autoridad que genera miedo con su tiranía.
 
2064. La idea es el resultado de la acción del pensamiento. El pensamiento es siempre del pasado. Y con ese pasado queremos resolver los problemas que son del presente, del ahora. Pero mientras esté el pensamiento operando, nada nuevo puede salir, sólo desorden y confusión.
 
2065. En realidad todo lo que genera el pensamiento, es visto pero no es real. Es como si halláramos mentalmente con alguien que no vemos, pues es un invento.
 
2066. Todo lo que aparece en la noche, en los sueños, es todo del pasado, lo conocido. Es como si una grabadora –que tiene millones de años- se pusiera a pasar imágenes. Lo nuevo nada tiene que ver con deseo alguno. ¿Cómo podemos saber si lo nuevo florece en nosotros? No lo podemos saber. Sólo podemos hacer que lo viejo y repetitivo vuelva a ser nuevo, prístino. ¿Cómo lo haremos? Cambiando el mal por el bien, negando el ‘yo’ y sus ridículas ofertas.