Torni Segarra

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1865. Ten cuidado, alerta, que acabarás como si fueras del Ku Klux Klan o de los nazis. Te juntas con ‘malas’ compañías y te arruinaran la vida.  

 

1866. Te envío esta copia, hay otras más en las que se ve toda la brutalidad, la crueldad, la indiferencia hacia las personas, de la policía -y de los que la enviaron allí, que son también los responsables, además de los votantes que los han puesto en el poder-.

Creo que, tú que tienes un cierto poder, una actitud de limpieza y moralidad, advertir a todos -incluido los que mandan- que puede haber un levantamiento violento contra sus actitudes dictatoriales. Pues, usa la ley, la interpreta por la parte que le interesa, con tal de acosar, castigar, incitar al odio, contra los que ellos creen que son sus enemigos. 

Además, es una lucha de un gigante y un enano, donde el gigante tiene el apoyo y respaldo de los otros gigantes.  Y el enano, sólo recibe respaldo, ayuda, de los enanos. Lo que quiere decir, que el problema es muy grave, inmoral, lleno de corrupción, mentiras, falsedades. Como lo hacen todos los poderosos, que saben que por ser cruel con uno que es más débil, menos poderoso, va a ser visto como un tirano, cruel y despiadado. 

 

1867. Tú di lo que te dé la gana, si no perdonas, el amor no podrá estar en ti. Y tú lo sabes. Pero como estás metido en una trampa, no sabes cómo salir. Con humildad -compasión-, tal vez puedas salir.  

 

1868. A lo mejor, los que tú quieres eliminar, dicen lo mismo, para hacer lo mismo como tú: hay que separar el trigo de la paja. Lo que quiere decir, eliminar al que no piensa como nosotros. Mal camino. Muy mal. Pues habrá lloros, más rabia, más odio.

 

1869. El derecho no tiene nada que ver con el amor. Es decir, sin querer eliminar el derecho ni nada, el amor va más allá del derecho y lo que sea -un obstáculo para que sea-.

 

1870. He entrado en tus páginas web y creo que lo complicas todo demasiado. Está todo muy enmarañado. Por ejemplo: ¿no es mejor para leer algo, que sea de un único color contrastado con el blanco de fondo? 

 

1871. La mente tiene la capacidad de inventar lo que cree que le interesa. Puede cambiar la realidad, que no le gusta, por otra que le satisface más. ¿Por qué no queremos amar en vez de odiar, querer matar? Porque, tenemos miedo a perder, a renunciar. Porque. no vemos claramente, lo que es la realidad de la vida.

Si lo viéramos como el hecho que es, no tendríamos tantas ganas de matar. Ni un solo día de guerra, de matanzas.

 

1872. Hay que aclarar, que esas ‘bestias salvajes’, son enfermos mentales. Y, por tanto, hay que tratarlos como tales. No por lo qué han hecho. Si no, por qué lo han hecho, cuáles eran sus pulsiones mentales, su lucidez -si la tenía, la conciencia de lo que hacía-.

La víctima, ya no necesita nada. Son los parientes los que necesitan ayuda psicológica, para que ahora no se conviertan ellos en asesinos. Pues, ellos tienen tiempo para poder ver lo que hacen -si es que no les llega un arrebato y no se pueden controlar, como le ha sucedido a acusada del asesinato-.

¿Puede alguien cabal, sin ninguna idea de celos, de envidia, de odio, hacer daño a otro, matarlo?

 

1873. Tenemos que disculparlas, como a todos los que hacen algún acto de brutalidad, crueldad. Pues, las mujeres en general, y esas que han actuado inadecuadamente, han sido y siguen siendo maltratadas, tratas racistamente, como si fueran una raza inferior. 

Pues las personas, cuando nos sentimos oprimidos, maltratados, cuando son injustos con nosotros. Desarrollamos una energía que, es como si fuera una olla a presión. Que si no hay una válvula de escape -una satisfacción, un avance en la igualdad, el respeto- estalla la violencia.

Y eso son las revoluciones, tanto de izquierda como de derechas, el estallido de un malestar por la injusticia, la falta de respeto, la opresión. Por lo que, hemos de ir a la causa que genera la maldad, la crueldad, la violencia. 

 

1874. Para comprender la vida, hemos de conocer cómo funcionamos, cómo funciona el pensamiento, la mente. Y también cómo funciona la naturaleza. Nosotros, creemos que somos de una manera que estamos al margen, no nos afecta la naturaleza. Pero eso, es una ilusión. Solamente hay que ver cómo viven, funcionan los animales en la selva, para vernos a nosotros también.

El problema está en que nos revolvemos contra el destino, nuestra realidad, que no nos gusta. Y ahí, es donde empieza todo el drama. Los animales, no tienen ese problema. Pues ellos, aceptan su destino, no se rebelan. Ahora bien, los animales no se rebelan, porque son robots programados para que no se puedan rebelar.

Las personas, tenemos esa parte animal. Pero, hemos inventado la ilusión, de que podemos hacer que las cosas cambien para satisfacernos: queremos derrotar a la muerte, queremos ser perfectos físicamente, queremos ser los mejores, ganar siempre.  Vencer al dolor como a un enemigo, luchando de todas las maneras.

Y, es con esa estupidez, que queremos vivir; y pretender solucionar nuestros problemas. Pero, sólo cuando estamos directamente en contacto, sin huir de lo que está sucediendo, tanto dentro como fuera de nosotros, que la inteligencia se pone en acción, generando el orden, el confort, la dicha.