Torni Segarra

Seleccionar página
El amor abarca al frío paralizante y al calor sofocante El amor sufre a ambos, pero los soporta y entiende, por lo que todo tiene otra dimensión.
 
El amor no puede morir, es eterno. Los que morimos somos las personas.
 
‘Yo quiero, yo puedo, yo soy capaz’. Eso se tiene que demostrar. Y se lo tiene que demorar cada uno. Porque las palabras, no son los descrito, lo que se dice.
 
Si hay comprensión de la realidad, de lo que está sucediendo, el hecho de acabar verdaderamente con algo, eso queda quemado, aniquilado. Es cuando no comprendemos eso que nos sucede, o que ya ha sucedido, que va a volver y volver recurrentemente. Por eso, uno no tiene que huir tiene que estar con eso, sin querer cambiarlo ni tocarlo, sino estar totalmente atento a eso, y entonces todo su secreto queda al descubierto.
 
Llorar es otra actividad humana –al menos con lágrimas-. Por tanto, cada cual que llore lo que necesite. Y cuando ya esté agotado de tanto llorar, los lloriqueos desaparecerán.
 
‘¿Pueden ser amigo los exnovios?’. Todo depende de la necesidad que tengamos de relacionarnos con esa persona. Si lo intentas, descubrirás si puede o no puede ser favorable y funcionar.
 
‘Las mujeres fieles son las que más lloran’. ¿Por qué es eso, cuál es el motivo de tanto pesar y lloro? Es porque hemos inventado otra realidad que más nos  gusta. Y al vivir con esa realidad, que no es real, sino lo que debería ser, lo que me gustaría que fuera, es cuando llegan los fracasos, los golpes traumáticos psicológicos, las tristezas, los lloros, las depresiones.
 
Todo lo nuevo, en principio, al comenzar, puede escandalizar. Usar prendas de vestir o para tomar el baño en la playa, etc., siempre ha contado con la resistencia de una parte de la sociedad. Eso en cierto modo tiene algo de sentido, pues todas las personas no están capacitadas para exhibir y gestionar el llevar un tanga o ir con top less.
 
Nosotros vivimos ahora, eso está por encima de nosotros, ya que no sabemos por qué pero estamos aquí. Todo lo pasado tiene un valor referencial, ilustrativo-técnico-cultural. Pero, en el ámbito psicológico, ese pasado, es un estrobo y un impedimento, ya que nos divide del presente, del ahora. Por tanto uno lo tiene que usar ese pasado, como una enciclopedia, como un diccionario: una vez le hemos dado una mirada, se cierra y ya está.
 
Para hacer feliz a los otros, uno ha de estar feliz, ¿no? Así que uno ha de hacer las cosas para que la felicidad esté en él. Y esa felicidad que es orden, nos dirá lo que hemos de hacer en cada momento. Pues, la felicidad es libertad. La libertad, es inteligencia. Y la inteligencia es amor.
 
Si la relación es limpia, sana, siempre es lo nuevo. Porque siempre lo nuevo es el amor. Lo nuevo es lo que no hemos maquinado, ni manoseado con la astuta mente.
 
¿Por qué es que queremos ser lo que no somos? ¿Por qué esos artificios para aparentar lo que no somos? Si uno tiene una talla, no puede tener otra, si uno tiene la altura que tiene eso es suyo y no se puede alterar, al igual como el color de la piel. Todo artificio para querer cambiar lo que somos, acaba en la chabacanería del quiero y no puedo: frustración,  engaños, etc., haciéndonos daño.
 
Aunque estemos en el lugar correcto, con la gente correcta, etc., uno ha de estar siempre atento a todo lo que sucede tanto dentro, como fuera. Pues, si nos agarramos a algo, lo que sea, eso nos divide y fragmenta del ahora. Pues todo siempre está cambiando a cada momento. Por eso, uno ha de morir a cada instante a todo.
Porque si no morimos a cada instante que pasa, al convertirse en pasado, nos estancamos y empantanamos, sin poder seguir con el flujo siempre cambiante y nuevo de la vida.
 
Eso mismo pasa con la iluminación, la liberación, el nirvana, etc. Todo es fruto de tu mente. Por tanto, o uno se cree todo eso que se dice al respecto o no.
 
¿Puede alguien estar bien, en el sentido de perfecto? No lo podemos, pues ese bien, ese perfecto, es un invento, una ilusión. Lo real, lo verdadero, la realidad, es siempre infinitamente cambiante en sus posibilidades. Y cuando decimos algo –estoy bien o estoy mal-, eso no refleja la realidad, pues ésta siempre está cambiando. Es el recuerdo que se agarra a algo –a lo bueno o lo malo-, lo que le da continuidad, y nos atascamos.
 
Para David Mumford, Professor Emeritus of Applied Mathematics. Brown University. U.S.
He leído tu entrevista en el diario…, de hoy. Gracias por las informaciones y comentarios.
Me ha extrañado que dijeras: ‘Estoy sorprendido de que un banco español me haya premiado con 200.000 euros, creía que estaban arruinados’. Pues, es verdad que están arruinados, en quiebra, y han estafado a millones de clientes. Por tanto, lo que deberías haber hecho es rechazar ese premio. O, lo puedes devolver, diciéndoles que no aprieten tanto ni sean tan severos y crueles con los que no pueden pagar sus hipotecas abusivas y fraudulentas.
¿Sabes que ya se han suicidado casi medio centenar de personas, porque no podían soportar que en pocos días los fueran a dejar en la calle, sin casa, sin muebles, sin nada, por no poder hacer frente al pago de la hipoteca, al quedarse en el paro, sin trabajo?
Por otra parte, no sé qué ves tan extraordinario en una catedral que la están construyendo desde hace más de un siglo. ¿Cuántos miles y miles de millones se han gastado, y para qué, por el placer de ver la belleza en ese lugar, cuando está en todas partes allá donde estemos y vayamos? ¿Ves desde dónde nacen las crisis económicas, las morales, de dónde nace la provocación, los agravios, y la violencia, cuando hay personas pobres y miserables por las calles, cerca de ese catedral?
Eso es corrupción, esa misma corrupción que tú has aceptado, y todavía aceptas en tu universidad, en tus clases que das. Pues no dices la verdad, no pones al descubierto la corrupción que está en todos los ámbitos. ¿Por qué la toleras, eres indiferente a ella, no te importa el daño que hace a los más débiles y vulnerables, a los menos afortunados? ¿También eres de los que esperan que el presidente de turno, y sus burócratas servidores que lo rodean, vayan a poner orden en este mundo desquiciado, caótico y cruel?